miércoles, 13 de octubre de 2010

Conversaciones tridimensionales

"Si miras fijamente la realidad, podrás ver los pixel"

No recuerdo de quién es esta frase, pero sí recuerdo dónde la leí por primera y única vez. Pegada con un post-it en el ordenador de mesa que tenía un gran amigo hace algunos años, un ordenador que ahora es una auténtica antigüedad en comparación con los que él tiene.

En aquél momento yo no tenía internet en casa y compartíamos un ordenador entre los seis (ahora creo que tenemos cinco), no tenía teléfono móvil y tenía una cuenta de correo que apenas utilizaba, las redes sociales aún no acaparaban nuestro tiempo y los blogs como este eran peculiares diarios de bitácora vinculados a periódicos y columnistas de los cuales renegué durante un tiempo.

Unos años después tengo móvil, de hecho he tenido hasta dos números, un ordenador para mi solito, wifi en Zamora y en Valladolid, varias cuentas de correo, perfiles en tuenti, facebook y hasta filmaffinity, messenger y skype, juego en ligas de gestión de equipos de fútbol y baloncesto online... Supongo que todos estos teóricos avances han terminado por derrotarme de una manera contundente.

Una vez aceptada la nueva realidad, lo más positivo es tratar de sacarle el mayor partido posible y, a poder ser, en positivo. Las charlas por skype con la abuela y con los amigos que están fuera, las quince ventas de messenger abiertas con las adolescentes de un equipo que me enseñaron lo que eran los emoticonos y cómo se ponía una cara sonriente y una triste por escrito. He terminado por tener conversaciones de chat en cuatro páginas diferente con lo que he percibido una preocupante amenaza de una cierta esquizofrenia y he empezado a escribir lo que no tocaba en cada cajita.

El caso es que lo que normalmente y para muchos, incluso para mi hasta hace no mucho, era algo impersonal, una conversación bidimensional, casi insulsa y banal, sobre chorradas y una retahíla enorme de jaja o jeje o =) o =( según el día; he aprendido que también puede tener un contenido extremadamente profundo, que puede ser un lugar muy agradable en el que pasar las madrugadas e, incluso, un lugar al margen del tiempo y el espacio en el que compartir un café hablado.

Hasta tal punto llega mi repentino entusiasmo que se convierte en una de esas rutinas agradables, uno de esos momentos del día que terminas esperando durante la tarde, para que caiga el sol y te puedas sentar a escribir como si dijeras y leer como si escucharas, sin importarte la hora, ganándole tiempo al día siguiente.

Pero el día que esa rutina se rompe, y la conversación salta de la pantalla y se convierte en tridimensional, el efecto es tan gratificante que el peor trayecto por carretera que me veo obligado a hacer en estos meses (Benavente-Zamora), se convierte en un paseo bajo las estrellas, dulce y relajado.



p.d.: ahora bien, sigo sin entender por qué hay gente que escribe con faltas de ortografía, cambiando la c por la k... si no se ahorra tiempo escribiendo! luego claro, pasa lo que pasa en la opi...

domingo, 19 de septiembre de 2010

labordeta

mi oasis sería un paseo por el monte o por la playa, pero siempre con tranquilidad. Jose antonio labordeta.

Estoy sentado en el pasillo de un albergue de varsovia, pensando que se ha muerto labordeta, algo de lo que me entere rapido porque me lo dijo anoche un buen amigo.
Estoy escribiendo con el movil, lo que es un coñazo, pero tenia ganas de decirle por ultima vez a labordeta que le admiro y le respeto. Para mi siempre sera la primera persona que me respeto profesionalmente. Fue una vez que le entreviste para un estupido trabajo en segundo de carrera. Respondio con respeto a mis torpes preguntas y despues, durante la conferencia que dio en la rondilla hizo alusion a la pregunta que le habia hecho antes ´´un periodista´´ y esa fue la primera vez que alguien me trato como tal.

Le pregunte si creia que veria la tercera republica en españa y me respondio que no ´´porque aqui hay una revolucion pendiente y no veo animo de cortarle la cabeza a ningun rey´´. Despues sonrio, pero tenia razon y la tercera aun espera.

Al final le pedi que cantara algo para un programa de radio que comparti con unas amigas y lo hizo. Me quede fascinado.

Aquel programa se llamaba oasis y labordeta me dijo que el suyo seria un paseo...

miércoles, 25 de agosto de 2010

Lober

"Hay dos opciones, o llorar, o fabricar pañuelos para los que lloran" (Miguel Alejo)

Recuerdo uno de los chistes de El Club de la Comedia que decía que en España los pueblos se creaban cuando llegaba alguien, ponía un bar y, entorno a ese bar la gente empezaba a construir casas (ahora por lo visto recuerdo más los chistes de rubias). Si esto fuese verdad, en el caso de Lober el pueblo empezaría por ellos, serían su pulmón, su motor, los que consiguen que el pueblo no se pierda en el ostracismo al que le empujan las decisiones en cadena de unas administraciones que le dan la espalda.

Si fuesen como una orquesta, cada uno de ellos sería un músico que por separado suena desafinado, pero que en conjunto acierta con cualquier sinfonía. Ellos, obviamente, también son ellas, cada uno con sus padres, abuelos o tíos resistiendo en Lober como si de la última aldea gala se tratase, haciendo fácil lo complejo y manteniendo un espíritu que la vorágine de asfalto a veces dificulta ver lejos del campo.

El bueno de Miguel, que ya me soporta en este alonsodetejada, se ve que me echaba de menos así que me invitó a disfrutar de las fiestas de su pueblo. Entre estar "apipaó" e ir como un avión, uno llega incluso a adquirir una paz interior que es muy necesaria en tiempos de borrasca.

Ellos me hicieron sentir como uno más y así es fácil integrarse. La puta peritonitis me debe aún muchas cosas, una de ellas eran estas fiestas de las que me privó el año pasado.

Ah!, la cita de esta vez es de Alejo, que a la gran mayoría os resultará ajeno y extraño, pero que para mi es casi un compañero de trabajo porque le veo prácticamente una vez a la semana. Esa frase la dijo para criticar a los llorones ante la crisis, pero tiene un punto de aplicación a casi todas las cosas. En cualquier caso, tiene algo que ver con esto porque él también es, al igual que ellos, un gran defensor de su pueblo, en su caso, Almeida de Sayago. Quizá lo más positivo sea eso, que seamos estudiantes, curritos, subdelegados del gobierno o parados, tengamos un sitio al que volver, en el que estar y respirar hondo sin miedo de que se te llenen los pulmones de prejuicios.

viernes, 6 de agosto de 2010

Buenas noches, y buena suerte

A veces la falta de inspiración puede llegar a ahogar, a estremecer la mente con la inquietud de que esto haya sido todo, de un final anticipado, de que la fugacidad se convierta en la única realidad al alcance de uno. Supongo que me ocurre con cierta periodicidad. Te caes del alambre sobre el que te ves obligado a caminar, con la incertidumbre de saber si esta vez habrá o no una red que evite que la caída sea definitiva.

Creo que, al menos directamente, en este blog aún no había recomendado ninguna película. Aquí va una a la que acudo de tanto en cuanto en busca del norte de la dignidad profesional.

"Puede que esto no guste a nadie. Al final de este discurso, puede que algunos acusen a este periodista de morder la mano que le da de comer. Y puede que reprochen a la asociacion de haver dado acogida a ideas sudversivas e incluso peligrosa. Y sin embargo, el sofisticado entramado de emisoras, agencias de publicidad y patrocinadores permanezca impasible.Es mi voluntad y mi deber hablar con franqueza a los que integrais este sistema, sobre lo que ocurre en la radio y la televisión. Y si lo que voy a decir trae consequencias, yo soy el unico responsable de esta opinion.
Pasaremos a la historia por nuestros actos; si dentro de cincuenta o cien años aun quedan historiadores y se han conservado quinescopios de lo emitido en una semana por las tres cadenas, encontraran registradas en blanco y negro o en color, pruebas de nuestra decadencia, nuestro escapismo y nuestro aislamiento de las realidades del mundo en que vivimos. Somos una sociedad opulenta, acomodada y auto-complaciente. Adolecemos de una alergia innata a la informacion que nos perturba, los medios son un reflejo de esta situación. Como no dejemos de considerarlos un negocio, y no reconozcamos que la television esta enfocada basicamente a distraernos, entretenernos y aislarnos...la television y los que la financian, los que la ven y los que la producen, podrian percatarse del error demasiado tarde.
He comenzado diciendo que pasaremos a la historia por nuestros actos. Si continuamos asi, la historia se tomara la revancha y las consequencias no tardaran en alcanzarnos. De vez en cuando, conviene exaltar la importancia de las ideas y la información. Imaginemos por un momento; que un domingo por la noche, un espacio normalmente ocupado por Ed Sullivan, se ha cedido a un analisas del estado de la educacion publica. Y unas semanas mas tarde, un espacio utilizado por Steve Allen, se dedique a un estudio exhaustivo de la politica americana en Oriemte Medio. ¿Saldria la imagen coorporativa de los patrocinadores perjudicada? ¿Montarian los accionistas en colera y protestarian? ¿Que otra cosa pasaria?, mas que unos millones de personas recibirian un poco de luz sobre temas que puede determinar el futuro de este país, y por lo tanto, el futuro de las empresas. A los que afirman: - La gente no los verian, no les interesa, todo les da igual, solo quieren evadire...Solo puedo responder, que en la opinion de este periodista, existen pruebas que rebaten ese argumento. Pero aunque tuvieran razón, ¿Que tienen que perder? Porque si tienen razón, y este instrumento no sirve mas que para entretener, divertir y aislar... el tubo catodico ya parpadea y pronto veremos como la lucha esta perdida.
La televisión puede enseñar, puede arrojar luz y sí, hasta puede inspirar. Pero solo lo hara en la medida en que nosotros estemos dispuestos a utilizarla con estos fines. De lo contrario, solo sera un amasijo de luces y cables.
Buenas noches, y buena suerte."

Ed Burrow en Buenas noches, y buena suerte

jueves, 29 de julio de 2010

Pasos de utopía

A veces más que un paso es un tropiezo. Pero aún así avanzas, no te quedas parado, sigues en el camino y, mal que bien, vuelves a levantarte y a dar un paso más. Ahora, si nos quedamos afónicos, buscaremos otra manera de seguir contando historias, que es de lo que se trata esto, es para lo que uno ha estudiado, para lo que se forma, para lo que mantiene la inquietud de seguir aprendiendo y de arrimarse a los que se toman el tiempo y la dedicación de enseñarte algo. Los compañeros que están cerca y los que lo han estado son, al final, por los que merece la pena seguir dando un paso más, los que soplan a tu espalda para que no te pares. ¿Hacia dónde va este camino? Un día pensé que lo sabía, pero llevo como un año sin tenerlo claro. Entonces, cuando las certezas desayunan dudas, recuerdo las palabras de Fernando Birri que citaba el admirado Eduardo Galeano, aquelló de que “ella está en el horizonte, me acerco dos pasos, ella se aleja dos pasos; camino diez pasos y el horizonte se corre diez pasos más allá. Por mucho que yo camine, nunca la alcanzaré. ¿Para que sirve la utopía? Para eso sirve: para caminar”. Quizá ahora le añadiría que caminar a pasos o a tropiezos, pero avanzar al final, sin olvidar los pasos perdidos.

(publicado en La Voz de Zamora)

lunes, 12 de julio de 2010

Cerveza y fútbol

"Si lo sé no meto el gol" (Andrés Iniesta)


He leído bastantes artículos estos dos últimos días sobre la victoria en la Copa del Mundo y creo que lo que más me ha sorprendido es la facilidad con la que empezaban esos análisis, como si las palabras saliesen directamente. Creo que me sorprende por la dificultad que he sentido en estas horas para arrancar a escribir algo, para encontrar las palabras con las que empezar un relato emotivo sobre tantas sensaciones entremezcladas.

La cita de Iniesta es de la recepción en La Moncloa, cuando tuvo que hablar al oír su nombre coreado. Me resultó sintomático de lo majete que es este chaval, que tiene un año más que yo, y el espíritu de un grupo con el que se puede identificar cualquiera que alguna vez haya formado parte de un equipo. El tio es de Fuentealbilla, un pueblo de Albacete que esos que suenan a que han estado ahí desde el principio de los tiempos, hay algo más español que alguien de Fuentealbilla? Nos ha dado el mundial un tio bajito, calvo y feucho, con eso también se puede identificar cualquier español.

El domingo fue el día en el que los violines vencieron a los tambores, las flautas ensordecieron a los trombones y el fútbol de toque superó las patadas y logró que emergiera en mi el chavalín de doce años que jugaba al fútbol en campos de tierra. Luego me cansé de perder jugando al fútbol y descubrí que había un tio que se llama Michael Jordan y... en septiembre de 2006 estaba en el sofá del salón de Javi viendo como once chavales (Gasol tampoco jugó ese día) dieron un recital ante Grecia y ganaron el Mundial.

Ahora me parece que fue en otra vida aquél partido de baloncesto, me enamoré un poquito más quizá por poder compartir eso, por generar recuerdos y lugares comunes. Saber lo mucho que lo disfruté por sentirme parte de esa familia del baloncesto, por albergar a un jugador frustrado y a un entrenador en potencia; así que ahora me alegro de toda esa gente que desde el respeto y la sencillez ha defendido el fútbol "simplemente como un juego" que decía Benedetti.

Dos años después seguimos jugando finales de baloncesto mientras que el fútbol se unía a la lista de deportes colectivos que ya habían triunfado a nivel internacional con la victoria en la Eurocopa. Aquél partido lo viví en una cola en el aeropuerto de Barajas mientras nos aplazaban el vuelo a Buenos Aires y me enamoraba un poco más en algún lugar muy lejano de mis emociones. Vi el partido repetido en Argentina y sentí lo que puede reconfortar el deporte en la distancia.

Y ahora supongo que se pueden relatar miles de detalles de este Mundial, Mandela en la grada contemplando a unos futbolistas que no saben cuándo salió de la cárcel ni el tiempo que estuvo y un Paco González que fue relegado a vivir desde el sofá el Mundial pero que gracias a un amigo pudo contar el gol más importante de la historia de este deporte en este país.

Un gran amigo me recuerda, con razón, que todo esto tiene un punto de pan y circo que decían los romanos. Pensándolo bien, ahora sería algo así como cerveza y fútbol. Y quizá es excesivo, y quizá no es para tanto, y puede sea desproporcionado que salga tanta gente a la calle a celebrarlo, y que a lo mejor está sobre dimensionado y exagerado y es muy fácil y oportunista tachar a una sociedad de embrutecida por gritar al unísono ante un chaval que le pega una patada a una pelota. Pero qué cojones! Esto va por la nariz que le rompieron a Luis Enrique en el 94, por el gol que se comió Zubizarreta en el 98, por el penalti que Raúl mandó a la luna, por el egipcio que nos robó en Corea, por todo eso que nos contaron de que llevábamos el ser perdedores casi en la genética... Y todo lo ha volteado un chaval que tiene un año más que yo y que nació en un pueblo de Albacete. A veces me pregunto cómo puede uno contribuir a la felicidad colectiva para acercarnos a algo así...

domingo, 4 de julio de 2010

El viaje

"No me he ido yo, me han echado" (epitafio en Que se mueran los feos)


Una vez conocí a una chica que tenía su propio viaje, más bien su propia aerolínea. Despegaba y aterrizaba desde la cama. Luego conocí a otra chica que tenía una manera similar de viajar, aunque a veces siento que me vuelvo a tropezar con la primera, porque la otra creo que ya no viaja, no en avión, eso seguro.

Pero esto no va de un viaje convertido en trabalenguas. Hoy me siento un poco más didáctico, es más creo que, sin llegar a ser capaz de contar una historia, quizá escriba algo comprensible.

Mi viaje más recurrido desde hace 18 meses (madre mía, eso es mucho tiempo, es como dos embarazos humanos y como... no se, pero serán como cincuenta embarazos de hamster) es el de Valladolid-Zamora y viceversa. Más bien es viceversa, porque siempre tengo la sensación de ir a Valladolid y de volver a Zamora. Ese es el punto clave del viaje, el momento en el que me bajo del bus otra vez aquí, cojo la maleta y recorro esos quince minutos andando hasta Alonso de Tejada 17.

Entonces siento un pelín de resignación, un poco de qué estoy haciendo, hacia dónde voy... siento algo de ese que estoy aquí porque me han echado, no porque me haya ido yo de ningún lado. Pero creo que empieza a ser mentira, que esto ya es más como esa típica frase de película en la que dices, no, no, es una situación temporal. Y cuando te quieres dar cuenta... pues ya ha pasado más de un año de casi todo. Y hasta da vértigo, porque el subconsciente es un poco más lento de la cuenta.

El caso es que ese punto final del viaje cada vez me gusta más. Y no sé si es bueno o malo, supongo que la respuesta la tendrá el Isaac del futuro a quien, por cierto, hoy me ha recordado mi hermano que tengo que escribir.

Por cierto, que tengo ganas de contarlo por aquí. Tengo un vecindario curioso, pese a lo pequeña que es esta calle, ya me ha dado bastantes... sorpresas. La última, el recién elegido presidente del Zamora Club de Fútbol vive a veinte metros de este portal y hoy he montado un desayuno de trabajo con él y con otros cuatro presidentes de clubes deportivos de la ciudad. Vamos, algo que si me dicen que iba a ocurrir al principio de este viaje, no me lo creo ni de coña. Gracias por acompañarme en este viaje y en otros tantos.